¡Que reverenda estupidez! No me interesa tu nombre, que es lo que miras mientras caminas distraída por la calle, cuántas veces has amado, cuántas veces te has mordido los labios de dolor. No me interesa en absoluto si es que acaso te vas a morir mañana o cuantos cafés te tomaste hoy mientras pensabas constantemente con remordimiento en que se te había olvidado comprar el periódico.
Sin emabargo estás aquí y tomas de mi vaso y compartimos un cigarrillo pensando en un objetivo sin objetivo y en que quizá esta noche ya haya ganado algo, un poquito de ego y menos soledad.
Se apagan las luces y las guitarras ya no cantan. La Maga se va caminando a su casa, fumando el quinceavo cigarrillo del día y a quien putas le importa!
La Maga | Comentarios | 7
